¿Porqué es tan especial Zicatela?

Tomado de “Observando a Puerto” por Mark Argerakis

Zicatela. Foto: Lucano Hinkle
Zicatela. Foto: Lucano Hinkle

A sólo 50 kms del punto más al sur de la costa mexicana, Puerto Escondido yace sobre un tramo de la línea costera oaxaqueña que forma la arista entre los continentes de Norte y Sur América –punto enorme de energía en nuestro planeta. Colgando como un codo sobre las costillas del Pacífico, hay poco entre éste y los picos de Antártica a medio mundo de distancia. La costa atrae y absorbe cualquier cosa que le pueda arrojar el invierno del hemisferio sur, y toda tormenta entre Nueva Zelanda, Antártica y Chile enviará su oleaje avanzando miles de kilómetros al norte sobre el ecuador; esta costa será su primera parada.

Greg Long. Foto: John Harry Lackey
Greg Long. Foto: John Harry Lackey

La playa en Puerto Escondido da hacia el suroeste, desviándose del trazo general de la costa, y esto ocasiona que las largas y generalmente rectas líneas de oleaje se refracten y muestren una forma. La Punta, el sitio más al sur de la playa es el primer punto de contacto de un set o serie de olas. Se levanta y explota sobre unas rocas expuestas de aspecto muy desagradable que están justo en la punta, luego dobla y avanza sobre la línea de cúspides y arena que eventualmente se convierte en playa. La oleada continúa arremetiendo playa abajo de izquierda a derecha en su marcha por Playa Zicatela, aumentando en intensidad y tamaño conforme sigue su carrera. El punto donde rompe con mayor fuerza en Puerto se encuentra 2.5 kms más adelante y una ola que mide dos metros en La Punta eventualmente detonará en una bestia de tres metros en frente de la estación de las salvavidas.

Otro fenómeno geográfico único en su tipo, la falla de San Andrés se acerca a unos cuantos cientos de metros de la orilla en Puerto, donde el lecho del océano cae en picada de una profundidad de dos kilómetros hasta profundidades no conocidas. Las oleadas sumergidas se ven canalizadas como por un embudo a través de este cañón submarino a velocidades inmensas antes de que sean empujados sobre el inmenso borde en la orilla, obligándolas a levantarse y formar los tubos gigantes por los que es conocida la ola.

Es esta combinación de factores que ha visto a este tramo de playa convertirse en destino habitual de los mejores jinetes de olas grandes en el mundo. Con sus tablas, cojones, sueños y delirios vienen a tratar de ganar uno de los grandes y sucios tubos revueltos de arena de Puerto.

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